Tras la venta del M5 E34, que tan buen sabor de boca me había dejado, tenía en mente volver a hacerme con alguna otra unidad BMW M que devolver a la vida. Con el tiempo se cruzó en mi camino un M3 e46 con avería grave de motor, así que como ya tenía un motor S54 decidí dar el paso y hacerme con él, más teniendo en cuenta que siempre ha sido un modelo que me ha encantado.
La unidad en cuestión se trata de un BMW M3 E46 manual de 2002 color Carbonschwarz Metallic muy bien equipado:
Techo solar.
Asientos eléctricos, calefactados con memoria y regulación lumbar.
Navegador professional.
Teléfono.
Xenon.
Equipo sonido HiFi Harman Kardon.
Cargador de CDs.
LLantas EVO 19"
Climtatizador
Ordenador de abordo
Volante multifunción
Sensor de lluvia
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El corazón del M3 e46, el motor S54 3.2 de 343cv.
Tras cerrar la compra llegaba el momento de cargarlo en la grúa.
Tras unos difíciles días de espera llegaba el camión con el M3 e46.
El M3 ya en su nuevo hogar.
Llegaba el momento de empezar a ver bien que avería tenía el motor. Al quitar el cubre carter se confirmaban todas las sospechas de que había sido una rotura de motor en toda regla.
Restos de metal por todas partes.
Hasta viruta por la admisión.
Accediendo mejor al bloque motor se pudo confirmar la rotura por un bielazo. Típica rotura de estos motores S54 por un fallo en los casquillos de biela.
No solo un agujero en el bloque, sino varios...
Mas restos.
Lo que quedó del casquillo de biela.
La biela rota y deformada como si fuese mantequilla.
Lo que quedaba de la biela.
Reconstrucción de los restos de la biela.
Así que definitivamente motor totalmente roto. Había que cambiarlo por otro para poner este precioso M3 de nuevo en la carretera.